La plata también reluce

No es oro, pero el negocio de la compra-venta de plata empieza a brillar tanto como el del metal dorado. En una época de crisis donde el poder adquisitivo de los salarios no permite llegar a fin de mes, la venta de este metal precioso se ha convertido en una forma fácil de ganar dinero.

La plata es la segunda materia prima más utilizada del mundo, después del petróleo.  Su proceso de tasación es muy similar al de oro, pero el beneficio es mucho menor: El valor de la plata es inferior al oro, entre otros motivos, porque esta para manipularla debe entrar en contacto con otro metal lo que implica que el objeto a vender no será de plata al 100% sino que tendrá una pequeña cantidad de otro metal.

Factores a tener en cuenta

A la hora de vender un metal precioso, los vendedores deben tener en cuenta varias variables:

  • El estado de la pieza: la plata se estropea más fácilmente que el oro al ser más dúctil y maleable. Una pieza en malas condiciones nos dará menos beneficio al estar oxidada o rayada.
  • La pureza: La mayoría de los objetos de plata estarán fabricados con plata de ley, es decir, con un 92.5% de plata y un 7.5% de cobre, y llevarán un sello con la cifra “925”.
  • El peso: parece obvio, pero muchas veces nos olvidamos y no lo tenemos en cuenta. A mayor peso, a mayor ganancia.
  • El tamaño: está relacionado con el peso. A mayor tamaño, mayor cantidad de plata empleada y, por tanto, mayor beneficio.

Saber dónde venderla

Saber cuánto vamos a ganar en nuestra venta nos puede ahorrar más de un susto. Consultar el precio de la plata en el mercado nos ayudará a evitar que nos den gato por liebre. Según la pureza de la pieza, conseguiremos más o menos dinero. Por el precio por la plata de ley de 999 podemos conseguir hasta 600 euros por kilogramo (las monedas suelen tener este tipo de plata), por la plata de 925, unos 500 euros por kilogramo, y por la de 800 (la utilizada en cuberterías y pequeños objetos) cerca de 400 euros.

Con frecuencia, la plata pueden venderse a comerciantes locales, peón tiendas o metales preciosos, incluidos los joyeros.  Otros métodos son las subastas on-line. Para descubrir en qué joyerías se puede vender plata, estos comercios suelen publicitarlo de manera llamativa con carteles y letreros del tipo ‘Se compra plata’.

Para evitar sorpresas lo recomendable a la hora de vender es llevar siempre el DNI y exigir un recibo de la compra venta.

Por el contario, si queremos venderlo por Internet,  existen aplicaciones que calculan lo que puedes ganar introduciendo el peso y la pureza de la pieza y comparándolo con el precio de mercado.

Ganar un dinero extra siempre viene bien

Al igual que el oro vender plata puede ser una forma fácil de ganar dinero y puede salvarnos de un apuro en un futuro. Si tienes monedas o cubertería que no utilices, véndelo y sácate un dinerito.

DANIEL FERNÁNDEZ ABELLA